Desde la primera temporada, un trailer poco informativo pero muy alucinante nos intrigó a mirar los cortos más bizarros, experimentales y estéticos de la animación moderna, ya han pasado algunos años y la segunda temporada volvió con este hype de misterio.

Sin tantas sinópsis, diferentes visuales y una gran intriga por conocer los futuros distópicos en las múltiples realidades que podemos explorar como humanidad.

Esta serie narra historias que a simple vista no tienen ningún sentido cronológico, porque no lo hay, son historias fundadas en tres conceptos los cuales les ponen el título a la serie. Podemos hablar de amor, de la muerte que para el humano son complejidades no tan fáciles de abordar y por eso se pueden crear miles de teorías de como captarlas y la última y es la que ha encaminado el camino de la humanidad desde este siglo XXI, los Robots, o mejor dicho, la referencias tecnológicas y dependencias excesivas.

En esta ocasión nos presentan 8 cortos, todos de tiempo variados y de temáticas distintas; antes de tocar algunos de manera individual, cabe resaltar el trabajo de Tim Miller & David Fincher como productores y creadores de l aserie, y sólo para resaltar los trabajos anteriores, David siempre ha estado en grandes proyectos con Netflix como Mindhunter y si eres geek o fan de los comics, sabrás todo lo realizado con Tim por Deadpool, creatividad y buen manejo de tecnología no hace falta.

La palabra clave en todo este proyecto es la Antología, que juega un papel demasiado importante en cada uno de los cortos, aunque a simple vista no paraca, cada una de las producciones es totalmente diferentes, algunas técnicas con CGI no son implementadas de igual forma, hay algunos donde las texturas llegan a ser semejantes como últimos videojuegos. Las articulaciones parecen más naturales y las velocidades son tan iguales como si hubiera actores haciendo las mismas actividades, esto en ejemplos como “Snow in the Desert” o “Life Hutch”.

Hay historias que te van dando un punto de vista más profundo e interesante de ver la vida, una manera algo tranquila pero que entras en shock es el caso de The Drowned Giant”, el cual es una realidad aparentemente normal pero que como ballena, llega un gigante después de un huracán y su cadaver queda postrado en la orilla de la playa, un científico entra al campo de la filosofía el ver tan majestuosa figura gigante, en lugar de querer saber ¿Cómo funciona su organismo o mente?, se hace otras preguntas que siempre se hacen al ver las estrellas ¿Estaremos solos? ¿Qué propósito tendría él y nosotros? ¿Quién es el espectador? Súmamente sublime cualquier concepto involucrado y como episodio de los Simpsons, dejan un final que te ponen a pesar y preguntarte ¿Yo que hubiera hecho si lo hubiera visto?

Otra de mis favoritas fue “Pop Squad“, que toca un tema que quizás sigue estando vigente en nuestros años y es el de manejo de natalidad, pero aquí la diferencia es que se quitan los nacimientos y se remplazan por inmortalidad, dando tratamientos para rejuvenecer el cuerpo incluso por siglos. Nuestro protagonista es un agente que caza y elimina a los niños fugitivos (porque son ilegales y si encuentran uno deben matarlo), pero poco a poco su moral lo irá cambiando y entrará en debate de lo que le han enseñado de lo que es correcto. Tratando el viaje de redención y entendiendo el porque de la vida y como esta debe ser un ciclo bien explorado en un lapso corto de tiempo, entendiendo porque hay nacimientos y debe haber muerte.

“All Throught the House” es una joya que en realidad siento que no se enfoca en alguno de los temas principales pero es gran triller para una fiesta de navidad, extrovertida y extravagante a su manera y con una narrativa de suspenso. Hay futuros apocalípticos como el de “Life Hutch“, donde hay una guerra espacial y termina en una base desértica pero tiene que enfrentar a un robot asesino, que más que la historia, tiene mención honorífica por la participación de Michael B. Jordan y en la animación es exactamente igual, pareciera falso que es diseño de computadora.

En cuestión de animación donde se experimenta más y se ocupan elementos tradicionales pero igual de pesados son en “Ice“, donde más que la historia, los tintes, texturas y el como tu retina se expande para admirar paisajes coloridos en tonos opacos y llevarte a un ambiente de frío. Los mismo pasa con “The Tall Grass“, donde se siente más acartonado los diseños pero se manejan muy dinámicos.

Sin duda un gran proyecto ambicioso, que si peca de algunas malas historias pero quizás el verdadero atractivo es lo visual, el sonido esta bien y todo tiene y obedece a un orden, pero a comparación de la primera temporada, estuvo más corta esta y quizás queríamos ver otras cosas a un por explorar que justo por eso, se deja al espectador con ganas de más y sabes que independientemente de si te gustó o no en su totalidad, le darás otra oportunidad.

Apenas pasamos la temporada de premiaciones y venimos de una ronda muy pareja pero que inevitablemente, faltó resaltar el papel de las películas de este formato a lo largo de la cuarentena, y vaya que hubo ideas que hubieran puesto en jake o hecho polémica dentro del circuito de premios.

Sony Pictures Animation después del éxito y hype del 2018 con Into the Spider-verse, demostró que la animación no es un trabajo que va dirigido para niños, las vertientes de la animación congeniaron de manera orgánica y sublime, y aunque hablar del héroe arácnido es un plus, la idea de seguir demostrando lo que era capaz su estudio tenía fecha para el 2020 pero todo se pospuso y el estreno de The Mitchells vs Machines no veía oportunidad para ser proyectada en las pantallas grandes, Netflix saltó al rescate para poder ya por fin estrenar esta cinta en su plataforma.

Y si no hubiera sido por esta empresa, quizás no hubiera tenido la aceptación de parte del público, llevamos 3 semanas de su estreno y sigue en las listas de las 10 más vistas en nuestro país. Pero hablemos por partes porque enserio es difícil tratar de compartir la emoción y la fascinación de esta cinta en un texto sin sentirse tedioso al describirla o muy ñoño.

Pensar que una película ambiciosa y con demasiadas técnicas de animación pudiera ser dirigida por un joven adulto es una locura, pero lo cierto es que esta cinta es el debut de Mike Rianda, que junto a Jeff Rowe también se encargó de escribir esta historia. Hay demasiados nombres, tan sólo podemos contar 5 productores y mucha gente a cargo en direcciones de animación o sonido, pero cada uno de ellos fueron de suma importancia y se ve el agradecimiento de esta producción al final de los créditos (contaremos más adelante).

La historia es algo que ya se ha visto antes, predecible y combina situaciones que sabemos como serán ejecutadas pero a pesar de predecir detalles o concluir ideas, estas no son basadas con los mismos clichés ocupados. Tenemos dos historias que se entrelazan, por un lado, una joven productora y animadora que está a punto de entrar a la universidad de sus sueños y alejarse de su familia, en específico, de su padre quien pareciera no comprenderla y no le da el apoyo suficiente en sus sueños, ella es Kattie Mitchell (Abbi Jacobson), pero su padre intenta un último recurso desesperado para intentar recobrar los buenos días de padre e hija, Rick Mitchell (Danny McBride) se aventura con su familia en un viaje de auto por todo el país; por otro lado tenemos a Mark Bowman (Eric Andre) quien es el Steve Jobs de la cinta y creo la inteligencia artificial PAL (Olivia Colman), quien se siente desechada por su creador al lanzar al mercado una nueva versión de ella y esto hace que se enoje la I.A. y empieza la trama, los humanos son secuestrados por las máquinas y nadie los parará ¿excepto la familia disfuncional cuyos intereses individuales son los que motivan en verdad a ser los héroes del planeta?

Vamos por las interpretaciones, en el caso de Abbi Jacobson, es algo bien manejado y crea un papel de protagonista orgánico, conoces sus intereses y tanto los millenials como centenialls se identifican con su personaje por querer encontrar seguridad y un respaldo en los artículos eléctricos. Ojo, no se hablan de redes sociales como tal, claro que existen y se ocupan pero no hay un problema en su navegación, más bien es la enajenación del hombre por las máquinas, desde cámaras fotográficas, celulares hasta juguetes. Por cierto si te quieres sentir viejo, Kattie es una joven que nació en el 2003 y ahora en 2021 irá a la universidad, eso quiere decir que tiene 17 años, ya no estamos tan jóvenes como pensábamos.

Cada personaje tiene momentos sublimes, donde reflejan su verdadera personalidad y motivan al espectador a apostarle a su favor para que sea un sobreviviente de este apocalipsis, Michel Rianda como Aaron, el hermano menor, se siente tan especial porque incluso mezcla sus vivencias personales; abre un poco su vida privada y nos regala su sentir en esta peli, cuando eres el hermano menor freak y raro que se siente tan a gusto con su hermana, te cuesta creer que ella se irá  pero también está en esa etapa de “Guácala, las niñas no son lindas (acto seguido, se pasma al ver a una)”.

La familia perfecta no existe y para detener lo que es el comienzo del apocalipsis, se tiene que trabajar en equipo, personas inadaptadas y que apenas logran comprenderse entre sí tiene que unirse para demostrar que las imperfecciones nos hacen diferentes y eso al final es lo que hace más fuerte a la humanidad. Tanto la familia al querer detener esta crisis como PAL (la IA), tienen sus motivos, unos viéndolas desde la perspectiva de “¡Hey, somos humanos, tenemos planes, no todos somos iguales, queremos vivir!” hasta la visión de PAL quien ha estudiado por años a nuestra especie y se ha percatado que entre más avances tecnológicos hay, menos interacción humana y valores son ejercidos, ambas posturas las entiendes y son debatibles, pero no son extremistas.

La familia Mitchell no ocupa tecnología sofisticada pero recibe ayuda de dos droides de PAL que salieron con mala programación, la solución quizás no es el exterminar al humano de la tierra ni dejar de usar la tecnología, eso lo comprenden los personas de Rick y Mark, uno como el padre que no le gusta ver a su familia pegada en el teléfono todo el día pero que aprende que su hija trabaja con la computadora y programas y eso lo ocupa para hacer cine, y el otro como creador de PAL que intento crear la perfección para gente que no lo es y que necesita ponerse límites para no caer en la dependencia.

Para no tardarme más, hablaré de los últimos tres puntos por la cual la considero perfecta y quizás lo más alto en este año, enserio, Disney tendrá que recurrir a hacernos llorar con la historia porque aspectos técnicos nadie podrá competir.

Animación: Desde el minuto 1 te darás cuenta todas las técnicas que se empezarán a ver a lo largo de la cinta, obviamente inspiración en Into the Spider.verse y si eres amante de The Amazing  world of Gumball, entonces sabrás a lo que me refiero.

Fotografías de la vida real utilizadas, vídeos de memes virales, 2-D, trabajo de lienzos, arte pop, CGI, todo lo imposible hecho realidad, ver expresiones fáciles apoyando la emoción con lo absurdo de stickers queda perfecto, los letreros de momentos épicos coloreados a crayola y con prismas uff.

El Soundtrack: Aunque no sea original, son canciones que quedan en momentos específicos y meten intensión y trama a cada escena correspondiente, además de ser ultra GOD, lo más under recopilado para hacer chuladas. Bandas como Los Campesinos! Con “Death to Los Campesinos!” al inicio o Le Tigre con “On The Verge” en persecuciones de robots quedan fantásticos.

Resaltar al Crew: Creo que el momento más cursi y familiar se encuentra al final, dejando de lado la lección que nos da la cinta, se nota que es una película producida con amor, pasión y sobre todo empatía, ¿Recuerdan que les dije que esta también ocupaba fotos reales? Pues en los créditos nos podemos dar más detalles de la importancia y el valor que le dieron a cada uno de los involucrados, desde Michel Rianda hasta Phill Lord, pasando por los sonidistas hasta llegar al arte. Cada uno de los elementos humanos se ve reflejado con una fotografía de ellos en su infancia, señalando quien es y mostrando algo íntimo en una cinta de valor familiar.

Jamás en la vida se había hecho homenaje tan bonito en una peli, no es que no se agradezca al crew, más bien quisieron integrarlos de manera más íntima a una cinta personal y si hablamos de la fortaleza como tal, también el tramoyista tuvo infancia y familia y que bueno que le hayan pedido una foto para poderla meter y que se resalte su trabajo fuera del típico crédito viajando a 3:4 por minutos y que nadie pela.

Sin duda es una cinta que vale cada minuto, es perfecta por donde la veas y tiene muchos elementos que te hacen admirarla, claro si sabes admirarla bien, porque si dices que es cliché, que ya sabes el final o que te aburren las películas para niños, entonces no te atraerá, desertarás sin darle la oportunidad a una joya de la animación moderna.

Chistes y memes modernos bien colocados, música estupenda no tan comercial, vertientes del proceso bien establecidas y una historia con buena narrativa que queda en clasificación para toda la familia. Ahora preguntar ¿SI hubiera estado en cines, la hubieran visto?

Barrio Pobre es una banda de Rock y Rhythm and Blues, originaria del oriente de la Ciudad de México. Fundada y liderada por Mario Sánchez desde sus inicios en 2001. Sus ritmos son una mezcla de diferentes sonidos que les permitieron introducirse en el circuito del rock mexicano. 

En este 2021 cumplen 20 años de trayectoria musical, actualmente la banda presenta su nueva grabación titulada “Transición”, misma que marca un entorno muy fresco de la nueva etapa que se vive en el mundo.

Esta nueva producción contiene 10 canciones inéditas, y platicamos con Mario San, la voz y guitarra de Barrio Pobre, y con Yoshi Da Silvva, baterista de la banda, al respecto de “Transición”, no te pierdas esta entrevista.

¿Qué nos cuentan sobre esta nueva canción “Transición”? ¿Cómo la trabajaron? ¿La hicieron antes de la pandemia?

M: Fue durante la pandemia, empezando todo iniciamos a trabajar con este proyecto, que viene llena de rock and roll, buena música, balada rítmica, con una temática nueva.

¿Cómo fue trabajar durante la pandemia? ¿Grabaron las canciones aparte o se reunieron?

M: Si nos reuníamos seguido, la composición de ciertos temas fue muy independiente. El estructurar una canción siempre es la base por principio de cuentas, en armar la armonía, en meter la letra, y darle un poco de armonía. Estos temas se les pasan a los muchachos y ellos prácticamente le meten los arreglos, por ejemplo Yoshi lo sabe, él que te cuente como fue. Yo por mi cuenta, fue el hecho de armar las canciones, componerlas y pasárselas a ellos para los arreglos. 

Y: La  verdad es que sí fueron meses de trabajo arduo, del trabajo en el cual realice una inversión de todo tipo, de tiempo y económico, estoy muy contento porque dentro de todo lo malo sacamos muchas cosas buenas, entonces preguntaban por ahí ¿cómo fue la creación de disco? En efecto, hubo muchas reuniones que tuvimos nosotros, porque bueno actualmente ya contamos con un estudio, obviamente con todas las medidas por todo lo de la pandemia y todo eso, nos reuníamos constantemente nosotros cuatro y pues bueno, si fueron días pesados, de verdad había días en los que trabajábamos 12 o 14 horas, nos encerrábamos y platicabamos, inclusive había días en los que no salíamos, y no sabíamos si comer o continuar, y le dábamos prioridad al disco, tiene 10 canciones totalmente nuevas, ya te imaginaras el hecho de estar nosotros ahí reunidos proponiendo ideas,  cuerdas, escalas, en mi caso todas las bases rítmicas. Al final, concluimos con un nuevo sencillo.  Ya empezamos a tener buenos frutos, lo vemos con nuestro público, con nuestra trayectoria de 20 años. La verdad es que si tenemos objetivos similares los 4, y queremos ver que historia tan bonita podemos marcar con esto que estamos haciendo. 

¿Hubo algún tema para grabar en este nuevo disco que fuera complicado o alguna situación que obstaculizará la salida del material?

M: Yo tengo un poquito para contar de eso, hay una canción dentro de este disco que se llama “Engaño”, tiempo atrás la quería echar a andar y los arreglos que le hicieron los chicos, fueron fantásticos, esta canción tiene muchísimo tiempo queriendo arrancar entonces a mi se me había hecho un poco pesadito el no poderla culminar, y ahora que la grabamos si me gustó, fue mucho trabajo y marcar el compás de un blues, el adaptarnos, tanto la guitarras como las baterías, fue un trabajo maravilloso, y a fin de cuentas siento que esa canción fue una de las más pesaditas para mí, en cuanto a darle el sentido a ese tipo de ritmo que manejamos.

¿Cuánto duró aproximadamente la producción del disco desde que empezaron con las canciones hasta que tuvieron el máster, y el material como tal?

Y: Lo que pasa es que en este año tres meses, no solo tenemos este disco, ya producimos otro, y será sorpresa para nuestra gente, fueron meses de mucho trabajo pero la verdad estamos muy contentos de todo lo que se ha trabajado. Queremos comentar que ya tenemos otras grabaciones que serán sorpresa, próximamente lo verán reflejado en nuestras redes sociales. Con el disco de “Transición” nos llevamos entre 7 u 8 meses aproximadamente por mucho. Es un trabajo arduo porque fueron meses de mucho tiempo, pero todos estamos muy contentos por todo lo que se ha logrado.

¿Tienen algún tema favorito de esta producción?

Y: Claro, me he dado cuenta de los cuatro elementos que somos actualmente yo creo que cada quien tiene los suyos, a mi en lo personal me gustan tres canciones, las cuales son “A mil por hora”, “Esto es así” y “Regresa”, esas para mi son mis favoritas. Escucho el disco y lo reproduzco en spotify, si se ha notado un cambio de lo que Barrio Pobre habría traído como trayectoria y justamente eso se debe a la esencia de cada uno de nosotros, de cómo interpretamos las cosas.

M: Así que digamos un tema, un enfoque, que sea mi favorito no hay tal cual; toda canción es como un hijo los quieres igual; fíjate que es algo bien raro, desde hace un tiempo se me quitó la idea de enfocarme en un sólo tiempo, en esto hay algo muy raro, a veces tú le pones mucha dedicación a un tema y le inviertes todo, y desarropas las otras y resulta que esa canción no le gusta a la gente, y les gusta a la que menos tiempo le has invertido. Es algo que la experiencia me ha dado con el paso de los años, a últimas todos mis temas he intentado hacerlos de corazón y echarle muchas ganas, todos los temas son mis favoritos, porque son míos. Me gustan todos los arreglos que hicieron los muchachos. 

¿Cómo van a celebrar estos 20 años de carrera artística?

M: Con una rica chela, no, andamos checando si ya dan viada a los eventos, esperamos festejarlos en algún toquín, estamos viendo cómo festejar de manera física estos 20 años; en caso de que no haya ese espacio pues andamos pensando en hacer alguna transmisión para el público.

¿Qué planes cancelaron por la pandemia?

M: ¡Hijoles! Fueron bastantes, fue mucho trabajo que se vino abajo, ha habido muchas cosas, la pandemia trajo muchas desestabilidad, el hecho de que nosotros pudiéramos adaptarnos a esta forma en todos los sentidos es muy difícil, pero mira la cuestión es que aquí seguiremos el trabajo que se canceló, los proyectos que se detuvieron, el poder de darle salida al festejo de los 20 años.

¿Recuerdan cuál fue su último evento en vivo antes de la pandemia?

Y: Yo no me recuerdo con exactitud, pero por ahí de Febrero.

M: Sí, yo tampoco me acuerdo.

Y: Lo que pasa es que hemos tenido eventos particulares, y no recuerdo con exactitud antes de que todo se viniera abajo.

¿Han realizado streamings?

Y: Sí, hace poco tuvimos uno, yo calculo que por ahí de mes y medio tuvimos  un streaming. en el cual nos ayudó un gran amigo que es amigo de Mario, y transmitió desde su canal que se llama “El Canal del Blues”, y él fue quien nos ayudó con el streaming, estuvimos muy atentos y checando comentarios.Barrio Pobre está integrado por Mario San en la voz; Andreu Ramsés Tercer en el bajo, Matt Sullivan en la guitarra y Yoshi da Silva en la batería. Durante su trayectoria de dos décadas, cuentan con diez discos que los han colocado en una muy buena posición alrededor del movimiento rockero.

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